Nadie puede acusar a los Browns de ser impacientes. Pero todo por servir (o no servir, en este caso) se acaba. Cleveland finalmente tomó una decisión que se esperaba desde hace mucho, mucho tiempo, y cesó su laboral con el coach Hue Jackson.

Jackson estuvo al frente de los Browns por 40 juegos, y en todo ese lapso solo presumió tres victorias, dos de ellas esta temporada. Desde que llegó a Cleveland para el inicio de la temporada 2016, los Browns son últimos de la liga en porcentaje de triunfos, eficiencia ofensiva, puntos por juego y rating total de quarterback. No ganó un solo encuentro fuera de casa en ese lapso.

Pero no es solo que Jackson haya sido malo para Cleveland, su récord de por vida como entrenador en jefe de 11-44-1 es un sólido indicativo de que esto no es para él.

Jackson ya había esquivado la bala del desempleo en enero pasado después de finalizar la temporada sin una sola victoria. En lugar de echarlo a la calle, el gerente John Dorsey retuvo a su entrenador y le quitó cualquier posibilidad de poner un pretexto, armándole un equipo joven y talentoso. No fue suficiente.

A pesar de ser los Browns, este equipo inició la campaña 2018 con algunas expectativas producto de la llegada de jugadores de la talla de Jarvis Landry, Carlos Hyde y el novato Baker Mayfield. Pero los problemas internos no tardaron en aparecer.

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Varios reportes apuntaban a una empedrada relación entre Jackson y el recién llegado coordinador ofensivo Todd Haley, en especial después de que Jackson criticara públicamente el accionar de la unidad tras la derrota de la semana 7 26-23 ante Tampa Bay en tiempo extra.

Más allá de quedarse corto con las expectativas y la revuelta interna en Cleveland, el equipo posiblemente tomó la decisión no solo ante la falta de progreso, sino ante la clara regresión que sufrían en la actual temporada. Después de iniciar la temporada con un empate, una derrota y un triunfo ante Steelers, Saints y Ravens en las primeras cinco semanas, han sido vapuleados durante la racha de tres derrotas.

Algo tenía que hacerse antes de que el equipo perdiera la poca confianza y esperanza que le quedaba.

Difícilmente Jackson vuelva a encontrar trabajo como entrenador en jefe en la NFL y se une a una larga de coaches que salen de Cleveland por la puerta de atrás (¿acaso hay otra salida?). De los nueve entrenadores que han tenido los Browns desde que volvieron a la NFL en 1999, solo Pat Shurmur ha recibido una nueva oportunidad con otro equipo y los últimos seis (Romeo Crennel, Eric Mangini, Shurmur, Rob Chudzinski, Mike Pettine y Jackson) han sido despedidos inmediatamente después del segundo juego de la temporada ante los Steelers. AS