Rizzo la depositó en la tribuna más alta en el segundo inning — un tributo improvisado para las víctimas de la masacre en su ex escuela secundaria en Parkland, Florida. Al cruzar el plato, Rizzo se tocó el pecho y señaló hacia el cielo. Ambos equipos lucieron parches en los uniformes en memoria de los muertos, y Rizzo tenía previsto recibir a cuatro familias de las víctimas en el juego del viernes.

Happ, por primera vez en un juego inaugural, desapareció el primer ofrecimiento del dominicano para poner al frente al os Cachorros. El equipo busca repetir el paso arrasador de 2016 que les condujo a su primer campeonato de la Serie Mundial en 108 años.

Kyle Schwarber también la sacó por Chicago, que salió triunfante pese a dos errores y una titubeante apertura de Jon Lester.

Fue un mal debut para Derek Jeter, el director ejecutivo de los Marlins. Pero la presencia de 32.151 espectadores en una tarde soleada, y con el techo abierto, fue una señal promisoria del potencial de la franquicia si Jeter logra ensamblar un equipo exitoso.

Por los Cachorros, el puertorriqueño Javier Báez de 3-0, una impulsada. El venezolano Willson Contreras de 5-1, una remolcada.

Por los Marlins, el dominicano Starlin Castro de 3-2, dos anotadas. Los venezolanos Miguel Rojas de 4-1; y Tomás Telis de 1-0. El puertorriqueño Yadiel Rivera de 1-0.

Source: Meridiano