El zurdo novato de los Reales de Kansas City, Daniel Lynch, puede que sólo tenga 10 partidos de experiencia en las Grandes Ligas, pero es lo suficientemente consciente como para reconocer que tiene una visión cercana y personal de algo raro.
El receptor de los monarcas, Salvador Pérez, encuentra formas de extender la temporada más productiva de su carrera hacia niveles superiores a diario. Este domingo, eso significó que el carabobeño conectó un jonrón por quinto partido consecutivo para ayudar a llevar a los Reales a una victoria de 4-2 sobre los Marineros de Seattle.
Salvy también se consolida en el segundo lugar entre los líderes de las Mayores con 38 vuelacercas esta temporada.
«Lo dije después de que bateó su jonrón (el del sábado). Llegué y pensé que estábamos presenciando algo histórico», dijo Lynch. «Creo que esto es algo que nunca olvidaremos viendo esta temporada».
Entre los jugadores que han jugado al menos el 75% de sus partidos como catcher en una temporada, Carlton Fisk en 1985 tenía el récord en una temporada con 37, y a Pérez aún le queda más de un mes de temporada.
Los 38 jonrones le dan a Pérez el segundo total más alto de un torneo en la historia de la franquicia, igualado con su excompañero Mike Moustakas en 2017. El récord del club de otro excompañero, Jorge Soler, con 48 establecido en 2019.
Además, sus 12 jonrones en agosto le permiten empatar el récord del club de Chili Davis para el mes ocho del calendario.
Pérez ahora tiene 17 jonrones desde el receso del Juego de Estrellas, igualado con Joey Votto de los Rojos de Cincinnati.
«He podido ver a algunos buenos jugadores», dijo el mánager de Kansas, Mike Matheny. «Él está ahí arriba en la cima de esa lista. Hay muy pocos tipos que se pueden dirigir al último mes de la temporada regular y decir que este tipo tiene que estar en la conversación como uno de los jugadores más valiosos de la Liga”. Destacó.
«Ser capaz de ver eso cada día – sin hablar de añadir a esa demanda y el valor de lo que está haciendo defensivamente. Así que todo el conjunto es una temporada muy especial que todos estamos presenciando ahora». Añadió el piloto.
Pérez, que cumplió 31 años en mayo, superó el récord de su carrera anterior de 27 jonrones en una temporada. También ha establecido marcas personales de una sola temporada en carreras empujadas (92) y carreras anotadas (62).
En 128 partidos, ha bateado .277/.315/.544.
Siete veces elegido para el Juego de Estrellas y con tres Bates de Plata en su currículum, el valenciano acaba de empezar a adoptar plenamente el juego del gato y el ratón de la planificación del partido para cada lanzador y cada bate, de forma similar a como ha abordado la dirección del juego detrás del plato como receptor.
De manera apropiada, Pérez hizo un punto para abrazar, en forma de un enorme abrazo de oso, al entrenador de bateo Terry Bradshaw en el dugout después de que conectara su 37º jonrón.
Bradshaw, quien entrenó por primera vez a Pérez cuando ambos estaban con el Northwest Arkansas (Doble A) en 2011, ha sido el conducto del criollo para los datos, informes de exploración y las tendencias de los lanzadores sobre una base diaria y durante los juegos.
«Es uno de los mejores», dijo Salvy sobre Bradshaw. «Se preocupa. Cuando la gente se preocupa por ti, tratas de hacer lo mejor para ellos. Él se preocupa por todos. Siempre está prestando atención a lo que haces o ayudándote a conseguir algunos números, como puede ser que empiece con un slider aquí. Es súper inteligente. Cuando me dice que va a empezar con un slider, al 100% estoy viendo un slider. Él hace un muy buen trabajo y nos da la mejor información que podemos tener para enfrentar a ese tipo ese día». Recalcó.
La actual racha de jonrones de Pérez en cinco juegos seguidos incluye grand slams en juegos al hilo, algo nunca hecho en la historia del club. Esos cinco juegos le han permitido igualar el récord de la franquicia de Mike Sweeney, establecido en 2002.
Sin embargo, Pérez ha tenido un tramo de cuatro juegos continuos con un jonrón anteriormente. Lo hizo del 6 al 9 de abril de 2017.
Salvador reconoció que el desgarro en el que está ahora es diferente porque aborda sus bates de manera diferente a como lo ha hecho en años anteriores.
Se nota en la forma en que desglosa sus bateos, incluso en sus conferencias de prensa después de los juegos. Se ponchó la primera vez que se enfrentó al zurdo de los Marineros, Tyler Anderson, el sábado, en parte porque Anderson fue en contra de su propia tendencia y no lanzó ni un cortador.
El lanzador de Seattle utilizó una fuerte dosis de bolas rápidas de cuatro costuras y un cambio para mantener a Pérez fuera de balance en el primer turno. En el segundo le lanzó cambios consecutivos y luego una bola rápida que le hizo volar con las bases llenas.
Pero la tercera vez, en la quinta entrada, Anderson trató de sorprender a Pérez con un cambio en el primer lanzamiento. El venezolano la bateó a 367 pies.
«Es un poco diferente», dijo Salvy. «Tenemos algo más de información ahora mismo también que va a ayudar, usando el iPad, cómo están lanzando y todo eso. Hay mucha información justo antes del partido. Sé que quizás durante el partido hay que cambiar. Depende de cómo te lancen».
Con información de The Kansas City Star
Source: Meridiano