Samuel Aldrey /@SamuelAldrey
Nadal contra Djokovic, ‘Nole’ contra Rafa. Una rivalidad que continúa estableciendo récords con mucha historia y una en particular que podría repetirse este año en el Australian Open que abrirá sus puertas el 14 de enero.
Djokovic y Nadal se han enfrentado en ocho finales de Grand Slam, con cuatro triunfos para cada uno. Pero en 2012 dejaron en la pista azul de Melbourne la final más larga en la historia y a solo 11 días para el inicio del primer Major del año recordamos aquel épico duelo.
Eran las 9:00 de la noche a 33 grados de temperatura en Melbourne. El 29 de enero de 2012 Djokovic y Nadal salen del túnel de la cancha Rod Laver. Ambos con las caras como piedras.
Nadal pega sus brincos mientras el umpire lanza la moneda en la red. Rafa perdió el lanzamiento y Novak eligió sacar. Djokovic llegó con un día menos de descanso, pero tampoco es ajeno al infierno de la tarde.
El serbio pareció sufrir más el calor. Se veía ahogado, sin fuerza en sus primeros golpes que terminaron con dos forehand sencillos en la red. El aire hirviendo lo rodeaba. Nole soltó la primera queja contra la naturaleza cuando su raqueta terminó estrellada contra el suelo tras el primer break que le hizo Nadal. El primer juego de servicio abriría un maratón.
Tardaron 40 minutos en disputar seis juegos. Al final de la primera manga se llega con el encuentro donde Nadal quería: set arriba y ya 1h20m de un duelo intensísimo.
El serbio salió con la rabia del primer set sin contención. Empujó desde el inicio de la segunda manga al fondo de la pista a un Nadal que solo podía defender. Djokovic golpeaba desde dentro de la pista con todo su repertorio: paralelas, golpes cruzados con mucho top spin que le quitaron la iniciativa a Nadal. El mallorquín acabó pegando un 4% de bolas desde dentro de la pista.
Con ese dominio total Djokovic se llevó el segundo y el tercer set por marcadores de 4-6 y 2-6. Ya habían pasado tres horas bajo el infierno australiano.
A las cuatro horas de partido llegó la lluvia para apaciguar la frustración del intenso calor. Las gotas acompañaron un grito a puño cerrado: es Rafael Nadal quien ruge porque antes de que se cierre el techo de la pista ha levantado un 0-40 que dejaba a Djokovic sacando por el título. Con 7-5, 4-6, 2-6 y 4-4 se para el duelo en el cuarto set.
Mientras los rodillos secan la pista, los dos rivales repasan lo que ha ocurrido. Nadal se pregunta cómo es posible que mande Djokovic tras ganar él la primera manga en 1h20m.
Al regresar a la pista ninguno cedía. Cada punto era un rallie de 10 peloteos o más. Pura intensidad y la adrenalina. Nole fue de embestida en embestida a por la victoria, por una remontada épica (4-2 en el quinto) y que se acabó con un 7-5, 4-6, 2-6, 7-6 y 5-7 en la final más larga (5h53m) de la historia, que terminó a la 1:30 de la madrugada australiana con Nadal y Djokovic exhaustos. Ninguno pudo mantenerse en pie en la ceremonia de trofeos.
Este año Novak buscará su 18º Grand Slam en el Open de Australia y que sería su noveno título en Melbourne, donde ya es el tenista que más veces ha ganado con 8 trofeos. Ya solo quedan 11 días para que inicie el primer Major del 2021.
Source: Meridiano