Ayer, con la puesta del sol, comenzó el Janucá, una festividad judía milenaria también conocida como “la Fiesta de las Luminarias”. Y es que por ocho noches consecutivas hay que encender una vela en recordatorio a las ocho noches que duró el aceite en el gran templo de Jerusalén tras ser profanado por los griegos, informó el portal rosario3.com.
Pero el mensaje es mucho más profundo: para los judíos es el triunfo de la luz sobre las tinieblas, de la espiritualidad sobre el mundo material.
Source: El universo