Los niños tienen prohibido ir a misa, advierte un cartel en una iglesia de China, un país donde los buldóceres arrasan los lugares de culto «ilegales» y los curas -con el corazón en un puño- entregan a las autoridades una lista de fieles.
En la céntrica provincia de Henan, una de las más pobladas, los católicos son blanco de una campaña del régimen comunista para «chinificar» las religiones, así como del desarrollo inmobiliario que destruye barrios e iglesias.
Source: El universo
Católicos chinos se quejan de que cada vez hayan menos sitios donde rezar
2018-09-15