La gobernadora de la ciudad japonesa de Tokio, Yuriko Koike, ha puesto este miércoles en cuarentena a los cerca de 14 millones de habitantes que viven en la localidad ante la “grave situación” provocada por la pandemia de coronavirus en el país. Así, Koike pidió a la población que trabaje desde casa siempre y cuando sea posible durante los próximos días.
“Estamos viendo un incremento del número de positivos esta semana”, ha lamentado, según informaciones del diario local «The Japan Times”. El Gobierno local ha confirmado 41 nuevos casos en un solo día, más de la mitad que el día anterior -que contaba con solo 17-. En total, el número de muertos en el país ha ascendido a 43, mientras que los infectados son ya casi 2.000.
Koike indicó que la capital japonesa se encuentra en una fase “crítica” en la que puede registrar una “explosión” en el número de contactos si fracasa y no actúa a tiempo.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores nipón ha pedido a los ciudadanos que no realicen viajes al extranjero a menos que sean “absolutamente necesarios”. La decisión ha sido tomada después de que el Comité Olímpico Internacional y las autoridades niponas acordaran suspender hasta el próximo año los Juegos Olímpicos y Paralímpicos. Voces críticas con el Gobierno han alertado de la falta de pruebas ante los comentarios y análisis de expertos, que aseguran que el número de contagios es mucho mayor.
La belleza de los ‘hanami’
Durante estos últimos días, ni la pandemia de coronavirus ni el impacto económico que está ocasionando a Japón han impedido la tradición de contemplar al aire libre la floración anual de los cerezos, que en estas fechas han seguido disfrutando libremente los nipones, desafiando cualquier intento de encerrarlos en casa.
El buen tiempo ha llevado a los japoneses masivamente a las calles y parques para participar en este ritual de observación de la belleza efímera de los brotes blancos y rosados llamado ‘hanami’, donde comen, beben y practican deportes en grupo. Pese a que han sido numerosas las cancelaciones de viajes turísticos al país en las últimas fechas, en los parques se mezclaron japoneses y extranjeros durante largas horas.
Source: La Razon