La Vinotinto se lució con un marco espectacular en el Olímpico

La Vinotinto se lució con un marco espectacular en el Olímpico

Luis Joel Moreno || @youmoreno08

Venezuela se dio un festín en Caracas ante la Bolivia de César Farías, a quien venció por 4-1, con un marco espectacular en el Estadio Olímpico de la UCV. El equipo fue de menos a más luego de tener un inicio dubitativo.

Se esperaba un lleno total el escenario de la “Casa que vence la sombra”, pero, como dato curioso, el recinto caraqueño se encontraba a su máxima capacidad previo a la salida de ambos seleccionados al campo de juego.

Una vez apostadas ambas oncenas en el centro del campo, se vivió un momento dorado. El anunciador oficial del evento, Atilano Hidalgo Peña, mencionó el nombre de la invitada especial, Yulimar Rojas, quien se llevó un caluroso aplauso de la toda la grada. La campeona de salto triple en Doha, se encargó del puntapié inicial antes del pitido reglamentario del juez principal, Gustavo Morillo.

Los aficionados seguían llegando mientras transcurría la primera mitad del encuentro, no así el ansiado gol, hasta que Rómulo Otero tuvo una pelota parada, la segunda consecutiva, después del aviso previo que tomó el arquero rival.

El ‘Escorpión’ le quitó rosca, en relación al cobro anterior, para que Yangel Herrera, con la complicidad del cancerbero boliviano, la mandara a guardar de cabeza para provocar el delirio en la gradas (38’).

Aún retumbaba el grito del gol de Herrera cuando llegó el segundo tanto de La Vinotinto, otra vez de pelota parada. Esta vez, un rebote que quedó en el área, producto de un intento de volea de Salomón Rondón, sirvió para que Darwin Machís definiera a placer con el marco libre y ampliara su racha goleadora (41’). El pasado fin de semana anotó, vistiendo la camiseta del Granada, en el Santiago Bernabéu. Ni más ni menos.

El cierre de la primera mitad se saldaba con un merecido 2-0 a favor del combinado nacional y toda la afición contenta. Bueno, no tanto para aquellos que apenas se aproximaban al recinto de Los Chaguaramos y preguntaban: ¿Cómo va el juego. Quienes hicieron los goles?.

En la segunda mitad, los de Rafael Dudamel aumentaron la cuota goleadora, pero con un sustico en el medio. Cinco minutos después del pitazo de Morillo, llegó el gol del caraqueño Rondón. El ‘Gladiador’ se mandó una chilena que levantó a todos de sus asientos, luego de un rebote que le quedó tras un tiro libre ejecutado por Otero.

Seguidamente, se conoció el dato de la asistencia total, el cual se registró en 20.112 espectadores, prácticamente un llenazo, tomando que la capacidad máxima de 20.490 asientos.

El descuento de Bolivia se fraguó tras un descuido defensivo. Gilbert Álvarez, con olfato goleador, batió en el mano a mano a Wuilker Faríñez y brindó una alegría a un grupo de hinchas bolivianos, ubicados en el costado izquierdo de la tribuna principal.

Tras el tanto de la visita comenzó el desfile de cambios. Yeferson Soteldo por Machís al 56’. Doce minutos más tarde, Dudamel cambió el esquema táctico a un 4-3-3, con el ingreso de Juanpi Añor por Otero, quien, como era de esperarse, recibió la ovación de los aficionados caraqueños. El “Oterooo, Oterooo, Oterooo” retumbó el escenario capitalino.

Sin incidencias destacadas en el duelo, se sumaban nuevos protagonistas: Rolf Feltscher por Roberto Rosales (77’) y Jhon Murillo por Jefferson Savarino (89’). Precisamente, el futbolista del Tondela fue determinante en la cuarta anotación venezolana.

Murillo, tras una gran acción colectiva, se internó al área y fue derribado por un defensor rival. El cobro desde los doce pasos estuvo a cargo de Rondón, que definió con calidad al palo izquierdo del portero (87’).

Dudamel, dos minutos más tarde, sacó al delantero oriundo de Catia para que recibiera una ovación ensordecedora de la fanaticada. Dos goles en su regreso a Caracas, más que soñado. Ingresó otro de la casa, Fernando Aristeguieta. Previamente, Júnior Moreno ocupó un puesto en el mediocampo en sustitución del otro goleador de la noche, Herrera.

Culminaron los tres minutos de tiempo agregado y ambos técnicos venezolanos se dieron la mano cordialmente. Por primera vez en la historia dos técnicos criollos se enfrentaban en un partido organizado por la FIFA. La cordialidad siguió entre Farías y Otero, quienes se fundieron en un fuerte abrazo antes de ingresar al túnel que conduce a los vestuarios.

En términos generales se puede decir que el Olímpico pasó la primera prueba. Aún resta el choque ante Trinidad y Tobago el próximo lunes. Los jugadores se sintieron conformes con el ambiente vivido en Caracas y no ven con malos ojos volver para un duelo de Eliminatorias rumbo a Catar 2022. ¡Seguid el ejemplo que Caracas dio!

Source: Meridiano

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