El Mar de Drake es una zona del planeta ubicada entre el continente americano y la Antártida en el cual se juntan los principales Océanos del planeta, el Pacífico y el Atlántico.
A raíz de esto, las condiciones climáticas del lugar suelen ser extremas, alcanzando vientos cercanos a los 100km/h con olas de hasta 10 metros de altura. La profundidad del mar alcanza los 3.500 metros y, debido a la unión de los dos Océanos, se producen corrientes submarinas complejas.
La extensión completa del Mar alcanza los 800 kilómetros y generalmente su paso, tanto por aire como por mar, requiere de gran trabajo y habilidad porque se produce gran cantidad de viento, escasa visibilidad y olas gigantes en el lugar, por lo que es considerado como uno de los sectores más peligrosos del planeta.
Antártida y Mar de Drake
A lo largo de los años, se han producido una gran cantidad de hundimientos en lo largo de la historia debido a las complejas condiciones del clima los cuales ocurrieron posterior a su descubrimiento en el año 1526. Durante los dos siglos siguientes gran parte de los barcos que pasaban por la zona no podían concretar su viaje.
En palabras del Senador Kenneth Pugh, Ex Comandante en Jefe de la cuarta Zona Naval entregó a Qué Pasa “El sistema de circulación atmosférico produce cambios bruscos en las condiciones de temperatura, visibilidad y sobre todo viento, en muy breve periodo de tiempo. Es un desafío complejo para la navegación y la aeronavegación enfrentar estas latitudes. Los pilotos y comandantes pasan por capacitaciones especiales para operar en estas zonas extremas”.
La geografía del lugar es el cruce más corto entre la Antártida y el resto de las Tierras emergidas del planeta. De acuerdo a diversos estudios químicos que se han hecho en el lugar, a través de dientes hallados en rocas sedimentarios oceánicas, este paso alguna vez estuvo cerrado, aproximadamente hace 41 millones de años, por lo que los expertos indujeron que antes de que se abriera, ambos Océanos estaban completamente cerrados.
Sin embargo, no solo el clima se mantiene complejo al momento de transitar por el lugar, sino que también este continúa siendo extremo al momento de llegar al continente blanco. El reciente accidente del avión Hércules C-130 perteneciente a la Fuerza Aérea Chilena revivió un negro recuerdo de un accidente ocurrido en la Antártida.
Accidentes de avión en la Antártida
El más más reconocido es sin duda el accidente del avión TE-901 proveniente de Nueva Zelanda ocurrido el 28 de noviembre de 1979, el cual consistía en un viaje turístico a la zona que finalmente se terminó estrellándose con el Monte Erebus, muriendo un total de 257 personas.
En aquel vuelo, una de las últimas comunicaciones que se tuvo con el piloto fue cuando este informó a través de la radio que esta descendiendo en forma descontrolada y que no podía volver a poner el vuelo en control.
Las investigaciones posteriores arrojaron que este accidente ocurrió por un cambio en la ruta del camino, provocando que el avión fuera redirigido a un camino que lo llevó directamente a la montaña donde finalmente colapsó. La controversia causada en aquellos años por la aerolínea fue porque ellos acusaron injustificadamente al piloto, sin haber realizado una investigación previa.
Del total de pasajeros, 180 era de Nueva Zelanda mientras que lo demás eran mayoritariamente norteamericanos, japoneses, australianos e ingleses. El clima y las condiciones extremas del clima sin duda han sido determinantes en las tragedias que han ocurrido en la zona, situación que en el caso del avión chileno, todavía se encuentra en investigación ya que informes preliminares arrojar que en la aeronave existió una falla eléctrica.
Source: fayerwayer