Redacción Meridiano

El mal momento que atraviesa Carlos González en la caja de bateo no le permiteaceptar faltas de respeto o intento de hacerle daño, por eso no le tembló el pulso a increpar al lanzador Chad Kuhl cuando éste lo pasó una recta de 97 millas por hora cerca de su físico.

“Es decir, la gente no puede decir que no fue apropósito”, aseguró González a MLB sobre la intención del serpentinero bucanero. “Claramente fue en el primer pitcheo, a 97 y adentro. Por eso reaccioné de esa forma”.

Las bancas se vaciaron y los jugadores de Colorado salieron disparados al terreno de juego para defender a CarGo, algo que en la opinión del mánager Bud Black, señala la compañerismo en su equipo.  “Este es un buen grupo que se cuidan las espaldas entre todos. Podemos hablar de eso desde los entrenamientos primaverales”.

El inicio de esa interrumpida confrontación también involucró a otro venezolano. Germán Márquez, que estuvo brillante sobre el montículo para conseguir su octava victoria en la temporada, golpeó a Andrew McCutchen y todo indica que el abridor de Pittsburgh decidió tomar una retribución.

Márquez fue uno de los más activos en el intercambio de palabras y, al finalizar el encuentro, dejó claro que el pelotazo a McCutchen no fue intencional. “Solo salí listo y ellos estaban atacando mis lanzamientos”, aseguró.

Francisco Cervelli también estuvo envuelto en la acalorada discusión, aunque en un rol de mediador. El receptor de los Piratas trató que su compatriota no intercambiara golpes y todo se quedara en palabras.

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