A completar la faena

A completar la faena

Diego Naranjo Cevallos / @diegonaranjo16

La temporada 2017 de las Grandes Ligas ha visto, hasta el momento, el resurgir de algunos equipos que en la campaña pasada no fueron rivales para el resto. Este año, ese grupo ha dado la sorpresa como dignos contendientes y han sido mucho más que simples animadores de fiesta y ahora son protagonistas. Al reanudarse la segunda mitad de la zafra, esas organizaciones tienen la misión de mantener el ritmo y para las novenas que no han podido rendir lo esperado, aún tienen tiempo suficiente para colocar sus nombres como candidatos a la postemporada.

El caso más llamativo ha sido el de los actuales campeones de la Serie Mundial, los Cachorros de Chicago, quienes en 2016 vapulearon a sus contrarios y terminaron cómodos como líderes de la División Central de la Liga Nacional con récord de 103-58, 17.5 juegos por encima de su más cercano competidor, los Cardenales de San Luis.

Una de las grandes diferencias entre los Cachorros 2016 y la versión 2017 ha sido el pitcheo. En la zafra pasada los dirigidos por Joe Maddon terminaron con la mejor efectividad en colectivo de todas las Grandes Ligas con 3.15 carreras limpias permitidas por cada nueve entradas. Un año más tarde la situación no es la misma al tener una efectividad de 4.15, la número once entre las 30 organizaciones de las mayores.

Ante las lesiones de dos lanzadores de vital importancia para el equipo como Kyle Hendricks y John Lackey, la gerencia de Chicago se movió para conseguir el brazo del colombiano José Quintana, quien viene de lanzar con los Medias Blancas. Este movimiento hace pensar que los Cachorros se  preparan para pelear fuerte en esta segunda mitad y anotarse como candidato a optar por uno de los boletos a la postemporada.

Un caso que resalta con luces propias es el de los Cerveceros de Milwaukee, líderes del centro en la Nacional, por encima de los Cachorros. Esta actuación de los lupulosos ha sorprendido a propios y a extraños pues es un equipo sin grandes figuras y que en 2016 terminó penúltimo en su división con marca de 73-89.

El mánager del equipo, Craig Counsell, ha logrado engranar un equipo versátil con jugadores capaces de rendir bajo cualquier condición.

“La fortaleza de este equipo es que tenemos una banca realmente buena y son jugadores que pueden responder en todo momento”, comentó el estratega a los medios que cubren la organización. “No veo un equipo titular y uno de reserva. Tengo 13 jugadores de posición con la capacidad de ser titulares a tiempo completo”.

Poder. El equipo no se encuentra entre los líderes en colectivos de efectividad y promedio, pero parte del secreto de estos Cerveceros ha sido el poder que han mostrado y suman la segunda mejor cifra de las mayores con 140 cuadrangulares, en buena manera gracias a la contribución del zurdo Eric Thames, quien tiene 23 para la calle (hasta ayer) y fue una apuesta de la gerencia ya que el jardinero tenía tres temporadas jugando en la Liga de Beisbol de Korea.

El equipo debe seguir rindiendo en todos sus aportes y jugando para .500 en la segunda vuelta  puede estar sellando su pasaje a octubre.

En la Liga Nacional, hay dos equipos que se están en la pelea y no estaba en los planes de los especialistas en la materia. Los Bravos de Atlanta y los Rockies de Colorado ha vivido un año que tiene contenta a toda su fanaticada y están en la contienda por la conquista de la postemporada.

Colorado comenzó con un año explosivo, el mejor de su historia y en estos momentos ha soltado un poco el pie del acelerador y son dueños de uno de los cupos del comodín con marca de 52-40, hasta la jornada de ayer.

Para terminar de firmar ese puesto, los Rockies tienen que repuntar en el pitcheo y confiar en que la rotación se mantenga firme a pesar de que está conformada con dos novatos como lo son Antonio Senzatela y Germán Márquez, ambos con buen año.

Atlanta terminó último el año pasado con récord de 68-93 y este año se encuentran a siete juegos del comodín y segundos en su división con marca de 43-45. El equipo debe jugar por encima de .500 para poder pelear un puesto de comodín o apuntar hacia la cima del Este que está en manos de los Nacionales de Washington con 9.5 juegos de ventaja.

En la Americana hay tres novenas que han dado un golpe en la mesa sin previo aviso. Los Yanquis de Nueva York junto a los Rays de Tampa han dicho presente en el Este de la Americana, mientras que los Mellizos de Minnesota dejaron atrás el mal 2016 para pelear de buena manera con los Indios de Cleveland por el liderato del Centro del joven circuito.

Los Yanquis llegaron este año con un equipo joven y de la mano de Aaron Judge se encuentran peleando con los Rays y los Medias Rojas de Boston en su circuito. Además son dueños de uno de los cupos del comodín con marca de 54-42.

A pesar del poder del bombarderos del Bronx, es la rotación la que genera más incertidumbre y más ahora con la reciente lesión del dominicano Michael Pineda, quien era el mejor lanzador del staff al sellar ocho victorias y cuatro derrotas. Para lograr llegar a la postemporada, la gerencia y el cuerpo técnico tienen que consolidar a sus abridores y es muy probable que estén buscando un brazo de valor en el mercado.

A la callada, los Rays de Tampa se han adueñado del otro comodín, luego de pasar la página de 2016. Este año muestran un equipo compacto de la mano de Evan Longoria, Corey Dickerson y Steven Souza, quienes se han encargado de la ofensiva. Este equipo solo tiene que seguir jugando de la misma manera para lograr colocar sus pies en los playoff y más aún con el aporte del criollo Wilson Ramos, quien no pudo jugar en la primera mitad por la recuperación de la operación en su rodilla derecha.

Por otro lado, los Mellizos vienen de ser el peor equipo en 2016 con marca de 59-103. Este año es todo distinto y se encuentran, antes de la jornada de ayer, a 2.5 juegos de los Indios por la punta del Centro de la Americana gracias al espectacular año de los dominicanos Miguel Sanó y Ervin Santana. Para ellos es cuestión de ganar los juegos claves para descontar la corta diferencia para poder llegar a la tierra prometida.

Source: Meridiano

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